sábado, abril 30, 2005

Dark Chronicle! yumyum!

Mio mio mio mio (gaviota mode)

Bueeeno, hacía tiempo que no me compraba un videojuego... y este RPG ya lo tenía en el punto de mira desde hace un par de años (la verdad es que voy detrás de cualquier RPG...), pero estaba absolutamente descatalogado en todas partes...

Y, de pronto, ayer viernes, casi al salir de un exámen de tres horas y pico (=_=), me llama mi cuñao (futuro ^^) y me dice que lo tiene localizado en la Fnac, pero que solo queda uno...
Como me daba palo pedirle que lo comprarse él, le dije que me lo escondieran (él y mi hermana) por algún lado y como iba a bajarme a Alicante a dar un voltio con una amiga, me pasaba y lo recogía...

Desde luego, escondido estaba (lo habían sacado de la estantería y lo habían apretujado detrás una fila de tres cajas con accesorios para PS2... parecía un juego de estos de la tele: "¿detrás de que caja estará el premio...?")

El caso es que me lo compré, y pese a que solo llevo un par de horas jugadas, la visión global es bastante buena: buenos fondos, música pochola (aunque a veces te raya un poco XD), buen diseño de personajes, buena estética (manga-3D) y con detalles curiosos (te dan una cámara de fotos para sacar imágenes de cosas y luego poder hacer inventos con ellas... lo que mola es que a veces los personajes extras se ponen a hacer el idiota cuando los enfocas... pero lo que me dio a mi por hacer es fotos a los malos cojoneros y decir : "me he quedao con tu cara, eh? eh?? ehhh?? pringao!" XDDD ... (lo triste es que lo decía en voz alta...) )

Eso sí, para mi que es un mezclijo del Final Fantasy IX (por la ambientación y por el prota, que le pones un rabo (por detrás, quiero decir... ^^UU) y es clavaito a Zidane), al .Hack (por el rollo de las mazmorras en donde hay que matar a TODOS LOS PUÑETEROS BICHOS) y al Kingdom Hearts (porque al matar a los monstruos te tiran cosas y cuando las cojes suena el mismo sonidito que en el KH, y porque el prota va dando leches con una llave... aunque esta vez es inglesa, ñejñej)

Pos eso, a ver como me rula... con lo que me ha costado dar con él ya podría durar, ya... o al menos hacer más corta la espera hasta el Final Fantasy XII y el Kingdom Hearts II... :_3

Saludoooteeesss!!! ^_^

PD: no, aun no hay Ribosoma Felíz... XD
PPD: Waaaa!! han traído a la tienda de comics de barrio bandanas de las villas de Konoha, Arena y Sonido, kunais de dos tamaños y colgantes del símbolo de Konoha... y de KAKASHI!!! YAAAAAAAAAAAAAAW!!!

jueves, abril 28, 2005

Living the University - Tiras


Como molan mis apuntes de microbiología...

Antes de nada, advertir que todo lo que sucede en las dos siguientes tiras es verídico XD (para mi desgracia...^^U)
Quería entintarlas y pintarlas para que quedasen cucas y eso, pero como no tengo tiempo, al final las he dejado así.

....

(La sonrisa de la primera tira también es de verdad... :_)

Living the University: El morenito de la clase 2
ILiving the University: El morenito de la clase 2 II

Ahora cuando lo veo no se si reirme o echarme a llorar... bwaaajajaja!! XDD

sábado, abril 23, 2005

Soy Ariel!

"What Disney Princess Are You?"

Ariel
You can swim, flip, dive and be one with fish...WHY DO YOU WANT MORE?

Wooo!! en el test de princesitas me ha salido Ariel!! ^__________^ * ¡y eso que he puesto que tenía el pelo negro y largo! XDDD
Si es que ambas somos unas coleccionistas natas... y nos van los morenos :)____ (morenos sin barba...)

Jo, que mona que es Ariel... *_* ¡ojalá alguna vez diseñe a un personaje como ella, mola un webooo! :D

Si me hubiera salido blancanieves me corto la venas ante la pantalla... joer, que niña más ñoña XD

miércoles, abril 20, 2005

Alguien debería inventarlo...



Quiero expresar algo y no se como hacerlo. Es algo pasajero, que tal vez a nadie le interese y que a nadie le parezca importante, pero quiero decirlo. Escribirlo puede resultar fácil: basta con juntar unas cuantas palabras y hacer una frase. Seguro que todo el mundo lo entiende. Pero nadie lo llegaría a comprender. A nadie le afectaría. Lo leerían, asentirían como se asiente ante una ecuación matemática y seguirían con sus vidas. Yo quiero que quién lea esto comprenda hasta que punto puede llegar a afectar a una persona una idea, o una forma diferente de ver las cosas… y eso no se puede conseguir eso con unas frases. No se puede.

Durante semanas he estado pensando en cuentos, fábulas, poesías y frases, en citas, en comparaciones y alegorías, en composiciones para dibujos, para pinturas… pero nada me convencía. Ninguna de las historias o imágenes me servían.

Sonará raro, pero cuando era pequeña siempre pensé que alguien debería de inventar algún aparato para colocarse en la cabeza y que registrara en papel los pensamientos. Porque es en la calle, mientras andas, cuando lees, a la hora de comer, por la noche al acostarte… justo en esos momentos es en donde tu mente se expresa y te habla, te cuenta las cosas de forma en que las entiendes, las comprendes, en que te emocionas por la sencillez y claridad de las ideas más brillantes, o de los complejos modos de pensar de las personas, tú inclusive. No se puede planear un pensamiento. No se puede dar forma a una idea tan abstracta, o al menos yo no puedo, por eso se recurre a cuentos y fábulas para que la gente entienda y asimile las cosas. Y, aun así, hay personas que no lo ven, que se niegan a ver que lo que hay escrito no es solo un montón de frases ordenada, que no son sujetos y predicados juntos, sino pensamientos profundos que pretenden evocar más pensamientos.

Cuando era pequeña me daba rabia que, al llegar a casa, no pudiera sacar las ideas fuera. No pudiese expresarlas y compartirlas. La veía como cosas preciosas y bonitas, como un libro alucinante que quisiese mostrar a todo el mundo para que también pudiesen disfrutarlo, para que sintieran lo que yo sentía al leer sus páginas, sus historias… Y no podía. Las páginas quedaban manchadas y rotas por el terrible y cruel filtro de las palabras, y me sentía impotente. Impotente y triste.

No me entienden.
No puedo hacer que me entiendan. ¿Por qué los pensamientos no quedarán registrados en papel mientras se piensa en ellos? ¿por qué cuanto intento sacarlos fuera salen desnudos y ridículos? Alguien debería inventar un aparato que transcribiese los pensamientos…


Y me sigue dando rabia. Miles y miles de ideas, pensamientos, conclusiones… todo se queda dentro. Quiero sacarlo, de veras que quiero compartirlo, pero hablar y escuchar las palabras vacías que salen de mi misma me hace daño. Es como si mutilara el alma que me ha dado esas ideas, como si fuera una niña desagradecida que tira los regalos que le dan por el suelo porque no sabe apreciarlos. El alma me grita, se enfada y deja de hablarme.
“¿Pero qué haces? ¿no ves que estás rompiendo todo lo que te he dado? ¡me duele ver que destrozas mis regalos!”

Así que no los saco por miedo a herirla, por miedo a destrozar los mensajes, a que se pierdan. Y siento no poder compartirlos, lo siento de veras, pero no encuentro la forma de poder mostrarlos.

La mayoría de poesías, cuentos e historias que escribo las suelo tirar. No me gustan. Están vacías. No me hacen sentir nada. Son palabras. Son solo un montón de palabras…

Pero no creo que me eche atrás. No creo que me retire. Tal vez sea difícil, y creo que jamás podré expresar ni la décima parte de las cosas que quiero contar, pero en ocasiones algo surge… una forma, una imagen abstracta que se transforma en un conjunto de palabras o imñagenes que, por un momento, dejan de serlo, y se convierten en pensamientos.
Cada vez que sale una idea que toma forma, una idea que de veras consigo escribir, que puedo trasmitir, me siento terriblemente contenta y feliz. Porque estoy transmitiendo algo. Porque estoy haciendo algo por los demás. Porque creo que la gente necesita aprender a pensar por si misma, aprender a cuidar sus ideas, sus pensamientos y su mente, y nada mejor para ayudar que transmitir ese cuidado, ese respeto: no destruyas tu mente, ¡cuídala!, no la maltrates intentando sacarlo todo fuera con palabras vanas: busca las frases adecuadas. Encuentra el modo de expresar tus pensamientos. Y disfruta de ellos, disfruta de ellos porque son tuyos y son una de las pocas cosas que nadie te podrá arrebatar jamás.

Porque es muy fácil guardármelo todo para mi. Total, yo ya lo tengo, a mi no me hace falta transmitirme a mi misma nada, porque yo ya sé lo que sé. Yo misma me lo cuento y repito todos los días. Cada idea está presente en cada momento, los pensamientos me los recito cada mañana y me los recuerdo al final de día. ¿Para qué transmitirlos a los demás, entonces? La sociedad ya tiene sus propios pensamientos que viene de fábrica, sus ideas estándar y sus ideales impuestos. ¿Por qué intentar transmitir los míos?

Darle la espalda a la sociedad, decir “yo no lo hago” y caminar por otro camino distinto está muy bien, incluso es relativamente fácil. Tienes que negarte a ser un clon, admitir que no te ves viviendo en un rebaño y partir hacia tu propia vida, buena o mala, pero tuya y de quien tu quieras dejar andar a tu lado, dejando así la gran autopista atrás. Pero lo verdaderamente difícil no es construir tu senda y marcharte, el verdadero reto no consiste en aislarse y rechazar a la sociedad…
El verdadero reto es integrarse en esa sociedad y no olvidarse a si mismo. Caminar entre ellos, transmitiendo tu ideas, mostrando otros pensamientos, enseñando las alternativas a la gente que anda cegada por los dogmas de la sociedad y la vida moderna, dando llaves para abrir las puertas que hasta entonces mucha gente ni siquiera había visto… e incluso recibirlas tu, porque no siempre ves todos los caminos, y a veces es otra persona el que te quita la venda a ti.
Ir andando entre el mar de gente, intentando llegar a sus corazones de maniquí y convertirlos en almacenes de nuevos sentimientos, a la vez que cuidas y enriqueces tu alma y tu persona a base de alegrías y tristezas, sorpresas y decepciones, intentando formar parte de todas esas vidas que casi todo el mundo ve como un todo, pero que por separado resultan mucho más interesantes… y todo esto sin romper tu imagen en el espejo, sin ver convertido tu reflejo ante el cristal como una figura desordenada y sin sentido.
Porque, a veces, la sociedad ataca a aquellos que van en contra de su doctrina y desordenan sus pensamientos, los confunden y deprimen, haciendo que la imagen que antes se mostraba segura y perfecta se vuelva desordenada en una mente caótica.

Pero yo se que si me olvido por un instante de quien soy, de mis ideas y de mis pensamientos, siempre habrá alguien que me lo recuerde, cuando menos me lo espero y cuando más me hace falta. Y entonces podré volver a levantarme y a pensar en como decir las cosas para que la gente las reciba y las sienta…

Porque solo puedo transmitir ideas cuando yo las comprenda.

Y hace tiempo que deje comprender todo el rollo que estoy soltando. ¿De qué chufas iba este post?



dónde está la llave?, matarile rile rile…




(realmente, alguien debería inventar ese aparato que registrara los pensamientos…)

Soy feliz!! :_) (III)


Oyó! yuuuuuuuuuuum! wooooo!!! (y demás sonidos baboseros...)

Esta mañana, a las nueve de la mañana, ha llegado un agente de MRW a las puertas de mi casa para entregarme un paquete... ¬¬U...
Como era muy de mañana, y como deberían saber ya los de servicios postales, a esas horas el universitario medio se encuentra sobando o recién levantado, así que recibí con el pelo sucio, totalmente despeinado, con pijama de perritos, en bata con un pedazo de agujero en la manga de cuando mi hermana se quemó haciendo café (tranquis, salio ilesa, pero la bata no...) y con una cara en la que se intuía claramente el pensamiento de "como no me traigas algo chulo te voy a reventar a collejas no jutsús", al agente de entrega (que debe de ser uno de los pocos que estan buenos de todo el servicio postal... ¬¬UU).

Tras preguntarme por el tamaño de mi perro al que había oído ladrar (mu grande, mu grande...) y tras hacer el comentario de que ya estaba todo pagado, me entrega el paquete... y entonces veo la luz. O_O

El distintivo de Dreamers.
Por tos laos.
Por toas partes.
¿¿Es posible?? ¿TAN PRONTO?

Me fui corriendo al salón y con sumo cuidado fui abriendo el precinto (de hecho corté el adhesivo con tijeras quirúrjicas XD) y... allí estaba.... un lagrimón salió de mi ojo derecho...

UZUMAKI -LIBRO DE ILUSTRACIONES DE NARUTO-

OYOYOYOYOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!! LA LECHEEEE CON COLA CAO SIN CALORÍAS!!!! :______________________)

Está muy chulooo!!! >_< WOWOWOWOWOWOWWW!!! OÝOYÓOOO!!!

Además, viendo las ilustraciones se puede intuír lo que va a pasar ^^ (algunas cosas son pa darles de capones al autor... Kishimoto, Kishimotoooo que te veooooooo....), pero en general el libro mola :3
Tal vez le vendrían bien un par de ilustraciones más de Kakashi, pero en fins... al menos sale en un montón en plan "¿Donde está Kakashi?" XDDD oculto enre la maleza, en un pajarito por ahí volando, al fondo oteando el horizonre... sigh... :_)

Pero sin duda la mejor ilustración es la de Kakashi (como no...) vestido de Anbu con sus perros ninja... wooooo.... megahiperwoooooooo!!...

Ains, que chulo... pensé que nunca lo consiguiría. Aunque ya podría Nacho haberme enviado alguna notita diciéndome hola o felicitándome las Pascuas, caray, que ya son años en Dreamers.... XDDDD (aunque es la primera vez que compro algo en Dreamers... y ha valio la pena!!!)

No te pierdas el próximo Miri-post, en el mismo Miri-blog, a alguna Miri-hora!

PD: ¡¡HABÍA UNA IMAGEN DE TENTEN!! ¡en serio! ¡yo la he visto! O_O no salía por separado (eso ya sería demasié...), pero estaba por ahí... joer, que es verdad, dejad de mirarme así...

domingo, abril 17, 2005

Soy de Gryffindor...

Want to Get Sorted?

I'm
a Gryffindor!


Pues eso... que me ha dao por hacer otro test de estos chachis, esta vez de Harry Potter, y me ha salido que si hiciera el test del sombrero ese que habla, me mandaría a la casa de Gryffindor...
...
...
Jopeta, yo quería Slytherin :_( Pero para que te saliera esa casa tenías que poner en el test cosas algo exageraditas (faltaba la opción de:
-¿Cómo celebrarías una victoria en un duelo?
a) darle la mano a tu rival para acabar como buenos amiguitos
b) echarte a temblar de emoción: ¡has ganado! ¡por una vez en tu miserable vida has ganado!
c) Sentarte a leer un libro: la victoria es secundaria, lo importante es la sabiduría
d) escupir sobre los huesos ensangretandos de tu enemigo después de haberle lanzado cinco patronus y bailar sobre su cadaver mientras gritas "jódete, mierda de mago de magia borrás!!!!
...

Adivinad cual habría que elegir para que saliera Slytherin... ^^U)

Bueno, al menos me ha tocado en la misma casa que Oliver Wood... lo malo es que tendría que estar tragandome la jeta del Potter todos los días ¬¬U (que es SIEMPRE la misma... por diso, que chiquito más inexpresivo... pone los mismo gestos para cuando le dan chucherías como para cuando le dan una patada en los huevos...)

Ale, a currar que ya es hora...

viernes, abril 15, 2005

Molly y la Espiral de los Sueños (Prólogo)



Molly corría con todas sus fuerzas por el frondoso y oscuro bosque, sorteando matojos y troncos caídos que aparecían por el camino y ponían en peligro su apretada huída. La niña miró sin dejar de correr a sus espaldas. No lo veía. Tal vez estaba oculto entre las densas sombras del bosque, o tal vez ya se había cansado y había dejado de perseguirla. Pero Molly no se fiaba. No podía dejar de correr, ya que de alguna forma sabía que si se detenía un solo segundo, el terrible monstruo la alcanzaría.
En su desenfrenada carrera, Molly comenzó a repasar de nuevo todas las claves. Era total y absolutamente necesario que diera con la clave exacta, si no, no podría escapar de allí nunca. Pero era realmente difícil encontrar una clave que podía ser cualquier cosa (un guiño, un movimiento de la mano…) con una criatura detrás acechándote, y además con mucha hambre.
Jadeante y muy asustada, y sin bajar su ritmo de carrera, Molly empezó a repasar todas las claves que le habían servido hasta que llegó a aquel bosque.
Pestañeó dos veces con fuerza…
No ocurrió nada.
Tosió tres veces.
No sucedió nada…
Pisó con fuerza cuatro pasos...
Tampoco era esa la clave que buscaba.
Desesperada, Molly volvió a mirar a su espalda.
Ni rastro del monstruo… tal vez era momento de tomarse un respiro. Después de todo, no podía encontrar la clave de esa manera. Al parecer, la Espiral se había renovado y la clave iba a ser completamente nueva, una que nunca había usado en todas las veces que había entrado allí.
La pequeña fue frenando su carrera poco a poco, adentrándose más en la oscuridad del frondoso bosque, hasta quedar apoyada en un roble cuyo tronco era el doble de ancho que ella.
Molly estaba agotada. Se agachó junto al tronco, apoyó las manos en las rodillas y descansó un poco. Pero no podía demorarse mucho. Sabía muy bien que cuanto más tiempo se quedara allí, más difícil sería encontrar la clave, pues cada cierto tiempo cambiaban y había que volver a empezar a buscar desde cero.
Y además había otro factor: esta muy asustada. Y las claves solían volverse más complicadas cuando se perdía el control.
Molly se incorporó y pensó atropelladamente en un montón de combinaciones.
¿Guiños? No, esa la había probado… ¿alguna palabra? ¡podía pasarse años intentando encontrar la adecuada! Y ella no tenía tiempo…
Un crujido cercano la alarmó, haciendo que de un salto quedara totalmente agazapada tras el enorme tronco. Asustada, asomó la cabeza y comprobó con sus grandes ojos castaños que no había nadie… o, si lo había, estaba escondido entre la oscuridad.
La niña suspiró, temblando.
- Molly, tranquila… -se dijo a si misma con un susurro.
Y entonces se llevó aterrada la mano a la boca. ¡Había hablado! ¡ahora sí que ya no tenía tiempo alguno!
De inmediato empezó a escucharse el estrepitoso sonido del crujir de centenares de hojas y arbustos al ser pisoteadas por la temible bestia, un sonido que elevaba rápidamente su volumen a la vez que el monstruo se acercaba hacia ella, atraído por su voz.
Molly perdió toda la calma que pudiese quedarle en aquellos instantes.
¡La clave! ¡la clave! ¡la clave!
La niña se llevó las manos a la cabeza, histérica. El sonido era ya demasiado cercano y pronto podría ver los tentáculos de la bestia entre los árboles. Buscándola, acechándola… con hambre.
Y entonces a Molly se le ocurrió, y justo cuando la enorme boca emergió entre la maleza a escasos centímetros de su cara, la pequeña cerró muy fuerte los ojos y dio una sonora palmada.


Cuando Molly abrió de nuevo los ojos, el bosque y el temible monstruo habían desaparecido. En su lugar, la pequeña se encontró en una salita con luz amarillenta, rodeada de estanterías y con un par de sillones en el centro de la estancia.
Molly destensó sus músculos, agarrotados después de tanto correr, y suspiró de alivio.
- Esta ha sido difícil… -se dijo en voz baja mientras se dejaba caer en uno de los sillones.
Sin embargo, el alivio no le duró mucho, y pronto su pecoso rostro pasó de una expresión relajada a una de fastidio. Conocía ese lugar. De toda la Espiral, era el sitio en el que más veces había visitado. Al final, después de unas cuantas visitas, había llegado a la conclusión de que había varios sitios como aquel a lo largo de todo el camino de la Espiral, como una especie de cadena de oasis entre el mar de sueños, lugares en el que sabía que nadie le iba a hacer daño, ni la iban a engañar ni a fastidiar. Sin embargo, a Molly no le gustaba ese sitio. No le gustaba su luz amarillenta, como si estuviera dentro de una fotografía vieja, ni sus extensas y retorcidas habitaciones cuadradas, todas ellas llenas de estanterías repletas de libros. Emitió un resoplido. Estaba en la Biblioteca.
Molly se levantó del sillón y empezó a vagabundear entre los pasillos, desganada. No cabía duda de que aquello era mucho mejor que el bosque oscuro, pero desde luego la Biblioteca no era el sueño ideal para ella. Era un lugar sofocante, y pese a que estaba completamente segura allí, sin monstruos ni malvados personajes que la pudiesen dañar, siempre que acababa allí la embargaba una sensación de intranquilidad, de desconfianza, como si en aquel lugar hubiera algo que no iba bien, que no encajase, pero no conseguía averiguar el qué.
Y desde luego lo que más detestaba de La Biblioteca eran, sin duda, los bibliotecarios.
Los bibliotecarios siempre estaban allí. Siempre. Y siempre acababa encontrándose con ellos, aunque ella no quisiera. Por eso ahora Molly había decidido acortar la espera y salir ella misma a buscarlos, en lugar de estar esperándolos sentada.
Generalmente no tardaban mucho en aparecer, pero en ocasiones se escondían entre las inmensas estanterías y la hacían perder el tiempo: por poco que le gustasen, los bibliotecarios en ocasiones la ayudaban a salir de allí.
Por suerte, esta vez no tardaron en aparecer. Tras una esquina, uno de ellos asomó una de sus enormes cabezas.
Los bibliotecarios eran personajes estirados, muy altos y delgados, con unas cabezas desproporcionadamente grandes y alargadas. Sus expresiones siempre eran duras, tristonas, con los gestos muy marcados bajo unas profundas arrugas. Eran más o menos como los cabezones de las fiestas de los pueblos, en donde una persona se ponía una enorme cabeza a modo de careta enorme, de forma que quedase una cabeza muy grande para un cuerpo muy pequeño.
El bibliotecario se encontraba ojeando un libro en aquel momento, y al sentir la presencia de Molly giró su enorme y alargada cabezota para mirarla. Su expresión era de cansancio, y sus enormes ojos quedaban tras unas minúsculas gafas de lectura.
Molly suspiró, un poco aliviada. El de las gafas… al menos era el de las gafas. La mujer era mucho más desagradable, al menos, a su parecer, y siempre que se encontraba con ella la sensación de inseguridad se incrementaba.
- Hola… -saludó Molly, saludando con la mano. Parecía mentira que acabara de salir de una persecución atroz en un bosque oscuro. Pero la Espiral era así: unas veces caías en un buen sueño, otras en una pesadilla, y otras en la Biblioteca… Molly ya se había acostumbrado a esos cambios. Eran su pan de cada día. – supongo que aun no estoy despierta…
El biliotecario la miró durante unos segundos. Molly recordó la primera vez que lo vio… en aquella ocasión la Biblioteca adoptó la forma de su cuarto durante unos instantes, y ella realmente pensó que había salido de la Espiral, que se había despertado. Pero entonces apareció él, el bibliotecario de las gafas, y con él trajo consigo todo el marco de la Bibliteca. La imagen de su cuarto desapareció, y todo se volvió de color amarillo viejo. “Aun sigues dentro”, le dijo aquella vez.
- Aun sigues dentro –le volvió a decir una vez más. Lo cierto que siempre la saludaba igual.
Molly observó el libro que estaba leyendo, por curiosidad, pero el bibliotecario lo cerró antes de que ella pudiese llegar a ver siquiera una página.
- ¿Puedo salir desde aquí? –le preguntó - ¿me falta mucho?
El bibliotecario ladeó un poco su enorme cabeza. Por un instante, Molly pensó que iba a perder el equilibrio de un momento a otro.
- No lo se. Nunca se sabe. La Espiral no marca un camino fijo. Se Salta por ella hasta caer fuera.
Molly no dijo nada. Sabía muy bien como iba el juego de los Saltos. De hecho, hacía nada acababa de hacer uno de ellos. Un Salto era el paso de un sueño a otro, y cada Salto se lograba al dar con la clave correcta. La claves cambiaban en cada sueño, y en ocasiones eran muy difíciles de encontrar o de hacer (una vez le tocó hacer el pino para poder realizar el Salto y cambiar de sueño… suerte que el sueño en donde se encontraba en ese momento se limitaba a un desierto con lagartijas con cola de cerdito y no en un bosque oscuro con monstruos como del que acababa de salir). Lo malo es que nunca podía saber en que lugar de la Espiral se encontraba una, o hacia dónde iba a ir. Simplemente caía en un sueño, y allí se quedaba hasta que encontrarse la clave para salir, Saltar y caer en otro… o, con suerte, caer fuera de la Espiral y despertar.
- Otra vez tú aquí…
Un pequeño escalofrío recorrió la espina dorsal de Molly al escuchar la profunda voz que habló a sus espaldas. Sabía muy bien de quién se trataba. Con una breve mirada al techo, Molly dio media vuelta para enfrentarse a la biliotecaria.
“Y yo que creía que podría irme sin tener que verla…” –pensó con cierto fastidio.
Y en efecto allí estaba, la bibliotecaria. Pese a que era una mujer, era exactamente igual a su compañero, la misma cara, las mismas arrugas y la misma cabeza enorme. La única diferencia entre ellos era el apretado moño sujeto con redecilla y palillos chinos que lucía la bibliotecaria justo en el centro del cogote.
Como siempre, la presencia de la mujer la puso muy nerviosa. Su gesto era más duro que el del hombre, y desprendía antipatía en todas direcciones.
Molly bajó un poco la cabeza, intentando aparentar respeto, aunque lo único que quería era dejar de mirarla directamente.
- ¿Me pueden decir la clave, por favor?-preguntó. En ocasiones se la decían. No tenían nada que perder… bueno, sí, podían perderla a ella, y visto lo visto con eso ambos ganarían mucho. No hacía más que vagabundear por sus estanterías y a ellos no le gustaba que nadie tocase sus queridos libros.
La biblitecaria la observó durante unos segundos sin decir nada. Luego, cogió un libro de la estantería y, mientras pasaba las páginas, dijo distraídamente.
- Papiro.
Molly levantó la mirada, algo sorprendida. Hacía mucho que no usaba una palabra como clave.
Los bibliotecarios dejaron ya de prestarle atención, y se dedicaron en cuerpo y alma a sus libros. Molly supo entonces que no sacaría nada más de ellos (cuándo se ponían con sus libros, era como si el resto de cosas desapareciesen para ellos) y que era hora de irse.
Se dirigió despacio hacia la sala en donde había aparecido tras salir del bosque oscuro. Quería darse un paseo antes de volver a Saltar. Al menos allí sabía que no iba a pasar nada, y necesitaba unos segundos de tranquilidad antes de zambullirse de nuevo en la Espiral. Quién sabe donde iba a caer esa vez. Con suerte podría caer en un sueño bonito, divertido, de donde simplemente no querría salir y podría quedarse allí hasta que el despertador o su madre la llamaran para ir a la escuela, sacándola bruscamente de la Espiral. Pero últimamente los sueños bonitos escaseaban. Molly suponía que debían de estar por ahí perdidos… la cuestión era dar con ellos.
La pequeña llegó por fin a la sala cuadrada en donde había aparecido. Llegaba la hora de realizar un nuevo Salto… y de no saber a donde iba a ir a parar.
La pequeña tomó aire y asintió con fuerza. Una cosa tenía clara: prefería arriesgarse a caer en una pesadilla a quedarse por más tiempo en la sofocante Biblioteca.
Así pues, Molly se preparó, se colocó justo delante de uno de los sillones, apretó los puños, y dijo la clave con decisión.
- ¡Papiro!

Y entonces la Biblioteca desapareció a su alrededor…



---
---

Notas varias:

Molly y la Espiral de los Sueños es una historia muy personal, con la que quiero transmitir lo que para mi era normal todas las noches. Y es que la Espiral de los Sueños, el sistema de claves, los Saltos, incluso la Biblioteca y los dos bibliotecarios son de verdad. Es decir, son cosas con las que soñaba cuando era pequeña. Todas las noches (o la gran mayoría de ellas), cuando me quedaba dormida me adentraba en lo que yo llamaba "El Laberinto" o "La Espiral", en donde había muchos sueños y pesadillas, y se saltaba de unos a otros mediante las claves. Así pues, muchos de los sueños por los que pasa Molly, en este prólogo y en los capítulos posteriores, son sueños que de verdad tuve hace mucho tiempo. No todos eran repetidos, generalmente la espiral se renovaba cada noche, pero sí que es cierto que algunos sueños se repetían... como la Biblioteca, de la que me acuerdo perfectamente. Recuerdo ese ambiente amarillento, como si te introdujeses en una fotografía vieja, y de los dos bibliotecarios, que me daban miedo pese a saber que no me iban a hacer daño (lo cierto es que el primer encuentro de Molly con el bibliotecario, cuando pensó que estaba despierta en su cuarto hasta que apareció él, transformando toda la habitación en la Biblioteca, también fue la primera vez que soñé yo con ellos... y recuerdo muy bien la desilusión al ver al cabezón ese ahí diciéndome que seguía dormida... que desgraciao, me viene ahora vacilando y le inflo a soplamocos XDDD).
El trasfondo la historia en general de Molly y la Espiral de los Sueños se me ocurrió ayer noche, y pensé que era una buena forma que contar esas noches dentro de "El Laberinto" como yo llamaba a La Espiral cuando era niña. No se si quedará como otra de mis historias inconclusas (y conociéndome, va a ser que...) pero al menos lo intento :)
Por cierto, el dibujo de arriba es el boceto de Molly... a que es monina?? :3

martes, abril 12, 2005

Corpse Bride



Contando los días, minutos y segundos hasta el estreno... (amo a Tim Burton. Es oficial.)

Para más detalles...

http://www.timburtoncollective.com/corpse.html`

Gracias Sans por el enlace ^_^

(sonará a guasa... pero no tenía el trailer. Soy feliz. Mucho.)

Esto es Hallowen!


:_)

¡Por fin me ha llegado la dichosa película! La he tenido que pedir a El Corte Inglés de Madrid para conseguirla, ya que la edición en dvd (y supongo que también en vhs... más conocido como "cinta de video" XD) estaba completamente agotada.

Jo... que felicidad. Simplemente ADORO esta película y simplemente ADORO a Tim Burton. En mi vida he visto una producción tan detallada, con una banda sonora tan orginal, una historia simplemente única en un ambiente flipante y con un diseño de personajes QUE ES LA CAÑA!!!! *__________*

Me encanta como se describe un mundo nuevo, tan diferente al nuestro que directamente resultaba imposible de representar a imagen real, usando la alternativa de la animación, recurriendo a los muñecos en lugar de a los dibujos para resaltar el ambiente macabro de la producción, de la ciudad de Halloween... macabro, pero a la vez elegante. Y no penséis que hacer eso es fácil: conseguir elegancia y belleza de entornos tan oscuros y pesados como los que muestra la película es condenadamente difícil, y más sin recurrir al machacado tema de la sangre o de las escenas algo dantescas como se suelen mostrar en muchas producciones que pretenden ser oscuras (y que acaban siendo gores ¬¬U).

Por eso adoro a Burton... logra sacar toda la belleza que esconde las producciones oscuras, como ya se puede comprobar en Eduardo Manostijeras o incluso Batman (para mi solo existen las dos primeras películas de Batman, las demás han sido una aberración mundana... y la peli de Catwoman es direcatmente un atentado contra la integridad de ese pedazo de personaje, cagüentó ya... XD)... aunque en Sleepy Hollow se le fue un poco la mano con el líquido rojo, juaaaa XDDDD (da igual, mola un mazo esa peli..)

En fin, no se bien como explicarme, ya que en serio que me emociono realmente al ver esta película... pero el caso es que creo que esta película es digna de admiración, y ya no solo por los personajes (y para que yo diga eso teniendo en cuenta que estoy perdidamente enamorada de Jack y Sally...), sino por la recreación del marco, de la ciudad de Halloween (impresionante... se me erizan los pelos solo de recordar esa plaza o ese monte ante la luna llena...), perfectamente contrastado con la ciudad de la Navidad, la música...
...
...
*sigh*...


"Sentarnos juntos,
ahora y siempre,
porque yo se
que tu eres para mi,
y yo soy para ti"

viernes, abril 08, 2005

El Descubrimiento



Mi perro es en realidad un mutante poseído por el emperador Silk, soberado del planeta Chufaloide, y planea invadir nuestro planeta mediante el ataque de chufas asesinas y resfrescos con gas sabor morcilla de burgos.
Lo he dscubierto... ¡¡poneos a salvo!! ¡¡os está mirando!! AAAAAAAAAAAAAAAH!!!

...
...

(mis post cada vez tienen más sustancia... ¬¬U)

lunes, abril 04, 2005

Como diseñar un personaje original de RPG


Wedding in Blood 4 (Red Tears), ¡¡por fin acabadooo!! XDD

Esta tarde me ha tocado hacer un pequeño trabajo de limpieza en mi armario (siendo lo de "pequeño" algo MUY relativo...), y tras apartar kilos y kilos de roña (en proceso la determinación de su procedencia), varias pastillas de naftalina, toneladas de papeles sin usar, más toneladas de papeles, esta vez usados (anda que no me he partido la caja viendo mis dibujos del isntituto XDDD... en cuanto supere el shock, lo mismo los subo, juazjuaz...) y tras comprobar que mi armario es en realidad un portal interdimensional a un universo paralelo en donde gobiernan las lechugas escocesas, encontré esto...

Como diseñar un personaje original de RPG (femenino) I
Como diseñar un personaje original de RPG (femenino) II

Creo que lo llegué a pasar por mail hace un tiempo... bueno, el caso es que lo vi y me hizo gracia XDDDD (cuando la menda se aburre...^^U)

viernes, abril 01, 2005

Fhera, La Nueva Orden (fragmento)


Dibujito que he acabado hace poquito

Bueno, a ver si puedo subir ya esto, que últimamente el blogger está MUY GRACIOSO con los errores ¬¬U

El caso es que estoy releyendo y corrigiendo las páginas que escdribí del juego de rol de Fhera (La Nueva Orden), para poder encuadernar los dos tomos en uno y que quede bonito y cuco (para una vez que escribo algo que tiene más de diez páginas... :_), y me topé con esta escena...
Tal vez alguno de los que jugaron se acuerde de ella, y recuerde que la hice así porque no se quién se quejó de que la historia era cuersi, lenta y sosa (¬¬U que majo), y decidí poner algo diferente (a partir de esta escena se sucedieron toda una serie de desgracias para algunos jugadores, juajuajua... nunca, NUNCA le toques la moral a un máster, ñeeeeeeeeeeeeej XD)

Lo cierto es que esta escena me gustaba mucho. Supuso un reto para mi, y creo que no me quedó del todo mal, por eso ahora que la he releído me ha entrado la morriña y he decido colgar un "pequeño" (^^U) fragmento.

Para los que ya lo leyeron (hace ya tres años... jo, como pasa el tiempo), espero que lo recuerden con una sonrisita (yo me lo pasé bien XD), y a los que no lo han leído aun... bueno, pues espero que al menos no os aburra mucho XD (recuerdo que era la primera vez que escrbía una escena de este tipo, y no se yo si el efecto que buscaba se habrá conseguido... pero es que era joven e inocente XDDDD)

ale, pos eso. A ver si ahora rula esto...

Nota: creo que he corregido todas las faltas... pero si véis aguna, porfa, dadme el chivatazo XD
Nota II: habrá algunos nombres que os suenen de libros y series (Coren, Vash...). Mi intención no era el plagio (obviamente XD), pero dí libertad a los jugadores de poder elegir el nombre que quisieran para sus personajes, y claro... pasa lo que pasa (yo también haría lo mismo, juazjuaz ^^U)

**

En el salón brillaba aun la lumbre, que era la única luz que alumbraba la estancia y que asomaba por la gran ventana del salón. Los muebles, todos sencillos y de madera, se hallaban esparcidos por la casa, volcados y algunos partidos, como si un vendaval hubiese entrado de pronto.
Yuu miró a Threa un instante a los ojos. Ella asintió en silencio, y el semielfo se encaminó hacia las escaleras que subían al segundo piso. Todos esperaron. Pero cuando Yuu bajó la expresión de su rostro lo decía todo.
- Nadie- dijo, y añadió- pero el piso de arriba está ordenado. Hay siete camas y dos mesas con cuatro taburetes en perfecto estado, pero llenos de polvo. No ha entrado nadie en esa habitación desde hace mucho, o, al menos, nadie se ha hospedado allí.
Noashela, al escuchar esto, desenfundó su espada y se dirigió hacia la puerta.
- ¿A dónde vas? –le preguntó Óbside sin girarse siquiera.
- A buscar a Loandro –dijo el elfo con determinación.
Y, acto seguido, salió de la casa. Faraguel se apresuró a seguirle.
Cuando llegó a la puerta, se detuvo y los miró a todos.
- Será mejor ir en su busca. No se que mosca le habrá picado ahora al humano este, pero no creo que haya osado a alejarse mucho de su casa. Tal vez salió a dar un paseo por el olmedo y se ha quedado dormido por ahí... después de todo, no está muy en forma.
Akasha se acercó lentamente a elfo, que la observó desde la puerta.
- Está bien, yo también iré.
- Iremos todos –dijo Vash acercándose. Óbside y Coren salieron directamente de la casa, sin decir una palabra. Pero Yuu y Thera no se movieron.
- Nosotros nos quedaremos aquí –dijo la elfa- cabe la posibilidad de que vuelva, y si así hace, le informaremos de nuestra llegada.
- Muy bien –respondió Faraguel, y mirando a Vash y a Akasha, añadió con un asentimiento - vamos.

El olmedo era aun más agobiante que el bosque. Estaba descuidado, desgreñado y sucio, y un aire sofocante, unido a un profundo silencio, pesaban sobre el ambiente y sobre los ánimos de Akasha. Nada más entrar, los tres había decidido separarse y buscar por diferentes sitios.
El olmedo, aunque empalagoso y sofocante, no era muy grande y los caminos abundaban, siendo casi imposible extraviarse teniendo un mínimo de experiencia, y menos siendo ladrona. Pero las ladronas también se impacientan. Hacía frío y Akasha comenzaba a hartarse de todo aquello. ¿Por qué no quedarse a dormir en la casa y punto? ¿qué manía tenían los elfos con buscar al Loandro ese si lo único que quieren es dormir y comer? Pues que duerman, coman y punto.
Entonces AKkasha se detuvo, extrañada. El frío, el cansancio y la creciente hambre le hacían pensar idioteces... ¡pues claro que querían encontrar a Loandro! ¿acaso ella no haría lo mismo por un amigo desaparecido y además enfermo? Casi había olvidado que los elfos con los que viajaba no eran iguales que los demás... Y se acordó de pronto de su conversación con Faraguel en el campamento...

A mi manera, he cometido mis crímenes

Sí, eso le había dicho el elfo aquella vez. Más o menos eso. Akasha dejó de sentir de frío, y recuperando su seguridad de siempre se llevó las manos a la cabeza y frunció el ceño.
- ¿Qué querría decir con...?- comenzó a decirse, pensativa. Pero la semielfa no tuvo tiempo de reflexionar sobre sus palabras, ya que, de pronto, lo escuchó.
Un sonido. Unas pisadas. Un gemido.
La semielfa bajó los brazos rápidamente, se puso alerta y agudizó los oídos.
Otra vez. Otro sonido, más fuerte. Otro quejido. Sonaba muy cerca, a menos de veinte metros. La ladrona se dirigió rápidamente hacia el lugar de donde provenían los ruidos, y por fin lo vio.

Un humano, alto y delgado, se hallaba encogido contra un árbol, apoyado pesadamente sobre el tronco. El hombre apretaba los brazos contra el pecho, y jadeaba ininterrumpidamente. Akasha salió de entre los árboles y se acercó lentamente al hombre, dudosa, con una mano en la empuñadura de la katana.
- ¿Loandro...?
El humano levantó entonces rápidamente la cabeza y la miró fijamente. La humana tuvo que retroceder con un sobresalto. Los ojos que se posaban sobre los suyos eran unos ojos llenos de locura, desorbitados y exasperantes, inyectados en sangre. La expresión del humano era de dolor incontrolable, y de su boca chorreaban borbotones de sangre.
El hombre levantó el brazo hacia Akasha. La semielfa retrocedió instintivamente, alejándose de aquella imagen.
- ¿Qué...qué...?- decía entrecortadamente la ladrona.
- Ve...ve....- tartamudeaba el hombre, acercándose tambaleante, como un zombie, hacia ella-ve... veeeee...
Akasha retrocedía a cada paso que daba el extraño personaje, con la expresión cada vez más asombrada. Finalmente, a unos metros de ella, el hombre se detuvo. Entonces se enderezó de golpe. Sus brazos dejaron de sujetarse el pecho y se estiraron fuertemente hacia abajo. Su rostro mostraba unos ojos desencajados, llenos de locura y desesperación.
- ¡¡¡¡Veteeeeeeeeeee!!!! –chilló, y entonces, como un balazo, su pecho reventó y salpicó de sangre todo lo que tenía a su alrededor, incluida Akasha, que cayó hacia atrás conmocionada. Pero aquello no fue nada comparado con el horror que sintió la semielfa al ver que del pecho destrozado del hombre comenzó salir algo.

El cuerpo yacía tendido cerca de ella, demasiado cerca, destrozado y abierto, y de su pecho asomó, bajo la estupefacta mirada de la semielfa, la cabeza lisa y chorretosa de sangre de una criatura de largo cuello. La bestia asomó de entre los restos multitud de órganos y costillas quebradas que antes habían formado la caja torácica del humano, y giró su cabeza de un lado a otro, hasta que al final se posó en Akasha. La ladrona vio con horror y absoluto pánico los dos ojos grandes, redondos y negros que se posaban sobre ella. La criatura observó durante unos instantes la figura paralizada de la ladrona, pero poco después comenzó a retorcerse y a girar bruscamente, quebrando huesos y aplastando órganos que aún quedaban enteros.
Dos patas, provistas de dos pequeñas garras, asomaron del interior del pecho del destrozado hombre, y se posaron sobre lo que antes habían sido los pulmones. Akasha observó entonces con horror como la bestia hacia entonces fuerza sobre los órganos con sus patas para salir, provocando el aplastamiento de éstos, que comenzaron a desprender finos ríos de sangre en dirección hacia ella. El cuerpo de la criatura descubrió dos patas más y una fuerte cola antes de salir por completo, pegajosa, resbaladiza y cubierta de sangre ajena.
Una vez salido, el animal –o lo que fuese- se irguió delante de la joven. Tenía un cuello largo, como de serpiente, liso y resbaladizo, que unía a una cabeza de forma rómbica con un cuerpo que se sostenía sobre cuatro cortas y finas patas, tan cortas que el vientre de la criatura se apoyaba sin problemas sobre el suelo.
Akasha se quedó sin aliento, y totalmente paralizada a causa de la dantesca escena que acababa de presenciar. La bestia la miró durante unos instantes, silenciosa, expectante, manteniendo a la joven ladrona bajo su hechizo de horror.
Y entonces, abriendo una enorme boca provista de dos hileras de largos y afilados colmillos curvos, lanzó un agudo chillido, penetrante y ensordecedor, y se abalanzó hacia la semielfa.
Akasha tuvo el tiempo justo de reaccionar y apartarse justo cuando el monstruo mordía el suelo en dónde había estado ella escasos segundos antes. La bestia levantó la cabeza rápidamente, y gritando otra vez, se giró de nuevo con furia hacia la ladrona. Akasha desenfundó rápidamente la katana, pero la terrible visión de las fauces de la criatura abalanzándose hacia ella la hizo perder los sentidos por un instante, vacilar y caer al suelo. La ladrona alzó la mirada y vio la boca de la bestia justo sobre ella, y cerrando fuertemente los ojos esperó a que llegara el dolor.

Pero ese dolor no llegó. Y a cambio, un silbido de espada pasó cerca de ella, y una brillante hoja se clavó entre la semielfa y la bestia.
Akasha abrió lo ojos entonces y allí vio a Noashela, sacando su espada del suelo y apuntándola hacia la sorprendida bestia.
- ¡Akasha! –gritó el elfo- ¿¿estás bien??
Akasha no pudo responder, pero asintió temblorosamente.
- ¿¿Qué demonios es eso?? – preguntó entrecortadamente.
Noashela giró la cabeza y vio el destrozado cuerpo del humano. Una sombra de pena cruzó entonces su impasible rostro.
- Loandro...
La criatura atacó y Noashela volvió en sí rápidamente. Alzó con fuerza la espada y apartó la cabeza de la bestia de un golpe. La criatura retrocedió, sacudiendo la cabeza.
- Es una corva –dijo el elfo poniéndose en posición de ataque y respondiendo a la pregunta de Akasha- un parásito, un virus. Se cría dentro de ti, hasta que crece. Y cuando crece... sale. Akasha miró con horror al que antes hubiese sido Loandro, comprobando la veracidad de las palabras de su compañero.

Como si hubiese reconocido su nombre, la corva se lanzó presto contra Noashela, que comenzó una encarnizada lucha contra la bestia, la cual a base de certeras entradas hacía al elfo retroceder cada vez más. Akasha se recuperó en un isptante al ver al elfo en peligro y se levantó, dispuesta a luchar e ir en pos de su compañero, pero Noashela la detuvo con un grito.
- ¡¡Vete!! – dijo mientras bloqueaba por unos segundos las dentadas de la corva con la espada- ¡¡ve y busca a los demás!! ¡¡corre y que vengan rápido!! ¡¡ni tu ni yo podremos vencerla solos!! ¡¡la retendré lo más que pueda!!
- ¡¡Pero...!! –replicó Akasha.
- ¡¡Corre!!
Akasha dudó unos instantes, pero finalmente se giró rápidamente y corrió hacia el interior del olmedo, vociferando los nombres de sus compañeros.

Noashela continuó la lucha fervientemente, pero las embestidas de la corva eran demasiado potentes y hacían retroceder a grandes zancandas al acorralado elfo, que no disponía ni de un solo hueco para lanzar ataques. Y entonces Noashela, al bloquear una potente dentada de la corva, tropezó con lo que quedaba del cuerpo del humano y perdió el equilibrio. La corva aprovechó el momento y se abalanzó sobre el elfo, que, a su vez, intentó desesperadamente levantar su espada para desviar el ataque. Pero la antigua herida del hombro infligida por Coren se resintió entonces, y la espada cayó de su mano, y con ella su única esperanza. La corva mordió en el lado izquierdo de su cuerpo, abarcando hombro, pecho y parte del cuello, atravesando carne huesos y alma con sus colmillos. El terrible grito de dolor de Noashela se escuchó entonces por todas partes del olmedo.

**

Woooo...