La historia de Hachiko es realmente conmovedora. Hachi era el perro del señor Ueno Eizaburu, profesor de la actual universidad de Tokio. Cada día acompañaba a su amo hasta la estación de Shibuya, donde el hombre cogía el tren hasta el trabajo, y volvía a buscarle a las tres, a su regreso tras las clases.
Pero un triste día de mayo de 1925, el profesor Eizaburo sufrió un ataque al corazón en la universidad y jamás volvió a casa. El pobre Hachi, que no entendía por qué su amo no regresaba, siguió yendo a la estación a buscarlo cada día a las tres de la tarde.
Durante casi diez años el perro estuvo yendo a la estación, y su historia de lealtad inquebrantable dio la vuelta a todo Japón. La gente iba a Shibuya sólo para verle, acariciarle y darle de comer.
En 1934, con doce años de edad, el fiel perro murió en la misma estación. En su honor se levantó una estatua (fundida durante la guerra y vuelta a crear en 1948) que aún hoy permanece ante la entrada de la estación de Shibuya, y que se ha convertido en uno de los más célebres puntos de quedada en Tokio.
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Escrito por Sandra de Lamo
Publicado originalmente en el tomo siete de Nana.
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Se me escaparon un par de lagrimones cuando leí esta anotación explicatoria al mote de una de las Nanas del cómic ("Hachi").
La inocencia, la nobleza y la lealtad que demuestran los perros realmente enternece a cualquiera...
18 comentarios:
Es como Seymour. La verdad es que estas historias me pueden, en concreto ésta la conocía y es tiernísima. Sniff.
Pues yo sabía que era un lugar típico para quedar, sale en muchísimos mangas, pero no me sabía la historia. Jo, es que emociona mucho.
yo ya me imaginaba algo asi sobre hachiko, y el manga de nana me lo afirmo
hachi mola, es la personificacion de la lealtad y da mucho juego en los mangas, lo he visto en "city hunter", "Gals", "nana", etc etc
PD: la raza creo que era Shiba, o algo asi, el tipico perro japo de los mangas de samurais vamos
lo he consultado, era un Akita inu de color blanco
Kalitro se me ha adelantado con lo de Seymour. La verdad es que la muestra de lealtad de Hachi es una de las historias más recordadas en el Japón actual y el significado de su estatua es bastante conocido incluso por los que somos de fuera. Un punto de reunión muy conocido, sí.
Es mítico, lo lei en kirai.net xD
o__o
;__________;
sniff, espera que le de un abrazo a mi perro aer si se me pasa...
;______;
me temo que mi perro no podría hacer como Hachiko... antes de llegar a ninguna estación se lo llevaría por delante un coche :_______3 (el pobre piensa que son sus amiguitos y que, por supuesto, se pararán cuando el pase...)
un amigo mio a adquirido una perrita recientemente (hace una semana) y me sinto como si hubiera tenido una hija! y lo mejor de todo es que yo soy ...
SU TIO SAMO!!!!!!!
(sniff, me emociono y todo)
Uo, que bonito, y mira que a mi los perros no me dicen nada, pero esta historia MOLA!
Bonita Historia
Si algun día voy a Japón, me tendré que pasar por ahi.
Hay otra historia de perro leal que se dio en Alemania, si no me equivoco. Este se quedó a vivir en el cementerio donde fue enterrado su amo, y sobrevivió alimentado por el guarda y por los visitantes. También tiene su estatua, lo que ya no sé es dónde fue.
Esperad... ¡Aquí está!
http://www.fotomaf.com/displayimage.php?album=68&pos=66
Edimburgo. Escocia, entonces.
Como dice mi viejo, es que los animales son más fiables que las personas.
bueno, tampoco hace falta irse tan lejos.
Yo aun recuerdo a un perro que se llamaba Calcetines que se quedó un tiempo (no recuerdo cuanto) a las puertas del hospital donde falleció su amo, esperándolo... creo que al final lo adoptaron por allí.
era españolito... u_u
tambien esta la historia del perro de Fry de futurama, snif animalico :__)
bueno, ese no es un caso real pero igualmente másmola :_3
PD: en este preciso instante, mi perro se ha pegado un resbalón él solo y casi se come el suelo... X_D
snif :_) ya conocía la historia, pero igual emociona...
Pobre Hackiko. T___T
T_T
Bonita historia. Yo nunca he tenido un perro, pero no me importaría tenerlo. En un futuro lo tendré, ñe.
De momento tengo un fiel periquito
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